La métrica de la distancia es el deseo
I.
De tu pie a mi ojo,
una distancia tangencial
que tenso para que te acerques.
De tu pie a mi ojo,
una distancia tangencial
que tenso para que te acerques.
II.
De mi beso a tu boca,
una distancia llamada deseo.
De mi beso a tu boca,
una distancia llamada deseo.
III.
Nuestras miradas enfrentadas,
una mínima distancia para andarlas.
una mínima distancia para andarlas.
IV.
De mi piel a tu mano
no hay distancia,
como de lo inevitable a los amaneceres.
cuando el deseo extiende su imperio, las distancias se acortan. ufffff. qué maravilla. me ha encantado.
ResponderEliminarbesos.
Es así David... no hay distancia si el deseo así lo quiere.. Un beso y gracias por tu visita.
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