No percibo nada,
ni mi falda nota el viento,
ni huelo la tormenta que viene.
ni mi falda nota el viento,
ni huelo la tormenta que viene.
Y es otoño,
pero con tal sosiego,
que ni las hojas se desprenden
de los árboles del parque.
pero con tal sosiego,
que ni las hojas se desprenden
de los árboles del parque.
Hay tanta quietud
en el fondo del océano,
que las olas han puesto anuncios
para buscar empleo.
en el fondo del océano,
que las olas han puesto anuncios
para buscar empleo.
Qué bueno!!! Me ha gustado mucho. Gracias por pasarte por mi blog y comentar. Con tu permiso, te copio el poema, y lo comparto en mi página del face.Además de agretar tu blog en el mío. Volveré para leerte con más tiempo. Un saludo
ResponderEliminarHola Juan! tendría que llamarte Rey Mago, ¡¡¡vienes cargado de regalos para mí!!!. :-) .
ResponderEliminarGracias por tu visita y tu mirada bonita sobre mis letras.