sólo fue un día
en el que mezclamos salivas,
en el que el mar salinizó nuestros ojos
y un cuerno de búfalo
sostuvo el gotero por el que nos pasó la vida.
Sólo un día en el que,
con sopa de letras,
buscamos vivencias y nos tatuamos
la huella gloriosa de nuestra existencia.
Si me remonto al encuentro,
deseo que tu estrella dorada
me apunte de nuevo.
El gotero por el que nos pasó la vida, me encanta Carmen, besos.
ResponderEliminar+gracias+besos. Feliz semana!
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